Descripción de una instalación de suministro de agua
El origen de una instalación de fontanería, suele ser la conexión a la red de distribución pública (Canal de Isabel II) o en su defecto, la captación particular a un pozo, aljibe, etc., y desde este punto surgirá una red interna que constará de diferentes tramos.
Las instalaciones de suministro de agua se clasifican, por lo general, según el sistema empleado para la contabilización del consumo de agua de sus usuarios, pudiendo encontrar las siguientes tipologías:
- Instalaciones con contador general, que disponen de una sola acometida que enlaza con un único contador, conectado al resto de la instalación y encargado de contabilizar el consumo de todos los usuarios de la misma. Es el sistema común en edificios destinados a servicios o edificación de pública concurrencia, en que existe un único abonado. También es el sistema a utilizar en viviendas de tipo unifamiliar.
- Instalaciones con contadores aislados, donde existen tantos contadores como abonados tenga el edificio. Son propias de edificios de ámbito doméstico multiabonado u otros de semejantes características, tales como edificios de oficinas en alquiler.
- Instalaciones con contadores divisionarios o centralizados (en batería o colector), que es la forma de suministro más habitual en edificios de ámbito residencial. La acometida enlaza con un tramo de instalación común del edificio, que culmina en un colector o batería de contadores sobre la que se conectan tantos contadores como abonados existan en el edificio. A partir de éstos, las instalaciones son independientes y llegan por separado hasta el interior de cada dependencia o vivienda. Permite la lectura centralizada de todos los contadores sin tener que acceder a las instalaciones privadas de cada usuario.
Independientemente de esto, según el DB HS4 del CTE, una instalación de suministro de agua consta de los siguientes tramos: la acometida y grupo de presión, instalación general (distribución y montantes) y las derivaciones o instalaciones particulares e interiores.
La acometida comprende el conjunto de tuberías, accesorios y dispositivos que unen la red de distribución urbana general con la instalación interior del inmueble o local. La instalación de la acometida corresponde por lo general a la empresa suministradora.
La instalación general conectará con la acometida interior del edificio. Este tramo de instalación transcurre por zonas comunes y su instalación corre por cuenta de la propiedad del inmueble. Está formada, entre otros elementos, por la tubería de alimentación, el contador general o batería con contadores divisionarios, el distribuidor principal y las distintas ascendentes o montantes.
Como distribuidores y montantes suelen discurrir por galerías, garajes y patinillos (en ocasiones a la vista), es recomendable que, tal como indica el CTE, su colocación y montaje sea visualmente ordenado para su perfecta e inequívoca identificación. En este sentido, las tuberías multicapa de Multitubo son ideales, ya que ofrecen solución a los grandes diámetros que se suelen requerir para esta parte de la instalación (disponible hasta 75 mm de diámetro) y tienen una estética limpia y ordenada. Una vez se llega a las viviendas, por norma general con diámetros de 32 o 25 mm, se podrá continuar, en función del tipo de instalación ya sea a la vista o empotrada, con tubería multicapa o AIS PEX-a de Multitubo respectivamente, para llegar hasta los diferentes puntos de consumo en diámetros de 20 o 16 mm.
En el origen de cada montante es recomendable instalar llaves de corte para independizar, en caso de avería, la instalación dañada del resto del sistema y no cortar el suministro a todos los usuarios. Y es importante mencionar que los distribuidores y las columnas deberán discurrir por espacios registrables, tal como detalla el CTE en su apartado HS 4 3.2.1.2.6 Ascendentes y Montantes.
Otra medida preventiva muy habitual contra los golpes de ariete, es la instalación de botellines o dispositivos de purga en la parte superior de cada montante.
Un caso especial dentro de la distribución vertical es la de los edificios en altura. No es conveniente que en un grifo se supere una presión de 4 bar (40 metros de columna de agua), con lo que, en el caso de encontrarnos en un edificio con estas características, se suelen prever distribuciones por grupos de plantas con elementos reguladores de presión en cada uno de ellos.
El recorrido de la ascendente culmina en la conexión con la válvula de entrada general de la instalación interior del usuario. La instalación particular debe contar de una llave de paso situada en el interior de la propiedad particular y situada en un lugar accesible para su manipulación. El trazado de la derivación particular se realizará de forma que las derivaciones a los cuartos húmedos sean independientes y cuenten con llaves de corte para cada cuarto húmedo.